sábado, 10 de octubre de 2009
Moon de Duncan Jones, el regreso de la ciencia ficción
Me da la impresión de que Moon, la opera prima de Duncan Jones -sí, el hijo de David Bowie- va a ser la gran revelación de este año. Es un film imprescindible que recupera la esencia de las películas de ciencia ficción, esas que elevaron el género a la categoría de obra maestra con films de la talla de Blade Runner, 2001: una odisea del espacio o Alien. De hecho, el propio Duncan ha afirmado que la estética de la película, plagada de maquetas al estilo de los años 70 y los 80, era muy importante: "queríamos que se pareciera a Atmósfera Cero o la primera entrega de Alien, hasta el punto de que resultaba interesante que el público viera Moon como si fuera una joya perdida de finales de los 70". Y vaya si lo consigue, el gran fallo de la ciencia ficción actual es que abusa de los efectos digitales, con lo que ésto le resta de verosimilitud, recordemos las recientes entregas de Star Wars. ¿No estaba todo excesivamente nuevo y limpio? ¿No tenía todo un aura de perfecta irrealidad? Eso frente a la trilogía clásica donde las naves eran creíbles, pese a que en algunos aspectos haya quedado algo anticuada. En Moon la nave es lo que podríamos esperar de la tecnología humana, así como las máquinas de transporte, que me han recordado a los auténticos vehículos lunares que usan los astronautas. Pese a ello, las imágenes de exteriores de la luna y la tierra están perfectamente conseguidas y son de una belleza escalofriante. Esto es, se pueden usar efectos especiales, pero al servicio de la película, y no al revés. Otro punto que hay que destacar es la soberbia interpretación de Sam Rockwell, único actor del film, y que pese a ello mantiene la tensión y la agilidad de la cinta, que no se hace pesada en ningún momento. Rockwell consigue además captar los matices que pueda tener una misma persona, y así, aunque da vida a dos personajes que en principio son el mismo, hay momentos en que nos hace creer que no son iguales (no quiero destripar mucho del argumento, es lo fundamental del film). Finalmente tengo que hablar de la maravillosa música de Clint Mansell, todo un descubrimiento para mi aunque haya trabajado para el cine en incontables ocasiones. Consigue desplazarnos con su música melancólica aunque a la vez futurista a la luna, y hacernos partícipes de la soledad del protagonista. No podemos olvidar tampoco el papel de la máquina en todo esto, Gerty, a quien en la versión original le pone voz Kevin Spacey. Una visión de las máquinas más amable que la diabólica Hal de 2001, aunque... nunca se sabe.
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Tengo muchas ganas de verla, a ver si puedo echarle el guante en breve. ¡Salud!
ResponderEliminarTe la recomiendo de verdad, a mi me ha sorprendido mucho y para bien.
ResponderEliminar¡Qué está pasando! Estoy de acuerdo con tu crítica en todo¡¡¡ Es una excelente película de género que va el grano (98 minutos¡) y tiene una interpretación magistral. Venga, por poner un pero Blade Runner y Alien me siguen pareciendo un punto mejores que esta ;)
ResponderEliminarSi, a ver si va a sentar esto un precedente je je. La verdad es que es un peliculón como no se veía hace tiempo en el maltratado género de la ciencia ficción. Y en cuanto a Blade Runner y Alien, es que eso son palabras mayores!
ResponderEliminarGracias por la recomendación, yo la vi ayer y me encantó.
ResponderEliminarAunque mi amiga lo considere un tostón, se quedara dormida varias veces y ahora mismo no me lo perdone jajajaja
Es un poco lenta, pero a mí me gustaba... Yo estaba en tensión... teniendo miedo de todo jajaja
Pero para mi amiga ha sido un tostón jajaja
Nunca llueve a gusto de todos
;D